Sé que tengo esto abandonado, cambiar de trabajo me ha dejado sin tiempo. En cualquier caso ahora ando entre dos libros que me han llamado mucho la atención uno ya está casi acabado que se llama «El Arte de llevar una vida creativa». Este libro es ideal para un eneatipo 4, solo por el nombre ya resulta atractivo.
El libro es sencillo y fácil de leer, es uno de esos libros que me cambia la perspectiva de las cosas y por lo tanto, es de 10, lo que más me ha «sacudido» es la idea de:
Dominar la técnica es bueno para la creatividad
Como apuntan en el libro: «en cuanto dominamos el oficio, se deja espacio para una creación capaz de superar los límites establecidos».
Aquí como eneatipo 4, siempre quiero las cosas para ya y si a la primera no me salen bien caigo en el desánimo y abandono. Esto es peligroso. Quiero diferenciar entre lo que me gusta y lo que no me gusta, lo que me resulta fácil y lo que no y hay que tener en cuenta que nadie aprende a conducir en una hora. La perserverancia es una forma de alcanzar el éxito.
Todo puede ser arte
«La laringe esculpe la corriente de aire y así se forman las palabras que salen por nuestra boca. Cuando pelas una patata, en el fondo estás haciendo de escultor»
Esto es de «Guau» toda una nueva perspectiva, si integrara esta idea, seguro que intentaba hacer del mundo algo más bonito. También hacen esa reflexión, de que lo ideal es hacer el mundo más bonito
Como apuntaba el libro es sencillo, cumple su objetivo de dar un nuevo concepto. A mí me ayuda a entender estos tiempos donde lo artesano parece que ha caído en desuso y habla de una paradoja, que los nuevos trabajos más digitales, al no ser «creativos» porque al final puedes no haber creado nada en todo el día, frustran. Como ejemplo en el libro hablan de que un electricista crea, cuando llega no hay luz por ejemplo y el hace, la vuelve a crear, un ejecutivo por ejemplo ¿qué hace? Reuniones, emails pero no hay nada tangible y esto puede llevar a la frustración. Por eso es importante tener una obra. Esto realmente me impactó bastante.
Hacen constante referencia al Zen y la meditación como formas de alcanzar la paz interior, aquí nada nuevo, pero lo reafirman: Tener una mente tranquila ayuda a la creatividad, pero no solo a ella, también a la vida.